Cuando vi la foto de Fabian Schweizer, de la campaña Baldessarini Campaign (Hugo Boss) AW 12/13, me cautivo la fuerza de la imagen y la expresividad reflejada en el rostro. Lo cierto es que, me planteaba un reto importante por la fuerza de las luces y sombras, y porque los rostros con barba se me resistían un poco, pero no por ello dejé de intentarlo. El resultado, si todo salía bien, podría merecer el esfuerzo. Así, el 26 de abril del 2020, en pleno confianamiento por la Pandemia, comencé esta obra.
Este retrato es inmediatamente posterior a la obra denominada Pandemia, que fué la primera en toda mi creación que expresaba una emoción negativa. Quizás por esto, dibujar a Fabian fué un desahogo necesario tras el retrato anterior. Un modo de interiorizar una, por aquél entonces, ilusoria vuelta a la normalidad pero, en cualquier caso, un necesario retorno a la positividad, que es algo intrínseco en mí.