Existe el placer y existe la dicha. Renuncia a lo primero para poseer lo segundo
Buda
Del libro "Alegria (claves para una nueva forma de vivir)" de OSHO.
Medita sobre esto lo más profundamente posible, porque contiene una de las verdades más fundamentales. Hay que comprender estas cuatro palabras, reflexionar sobre ellas. La primera es placer, la segunda, felicidad, la tercera, alegría, y la cuarta es dicha.
El placer es algo físico, fisiológico. El placer es lo superficial de la vida, la excitación. [...] está arraigado en el cuerpo. El cuerpo es tu periferia, tu circunferencia, no tu centro.
Quien busque el placer quedará a merced de la casualidad.
El placer depende del otro.
Has creado una prisión; ya no eres libre.
Así es como nos hartamos de las cosas: un día corres tras un hombre o una mujer y al día siguiente intentas encontrar excusas para librarte de esa persona. Es la misma persona; nada ha cambiado. ¿Qué ha pasado entretanto? Te has aburrido del otro, porque el placer consistía en explorar lo nuevo. Resulta que el otro ya no es nuevo; ya te has familiarizado con su territorio. Te has familiarizado con el cuerpo del otro, con las curvas de su cuerpo, con la sensación que te produce su cuerpo. Y la mente ansía algo nuevo. La mente siempre ansía algo nuevo.
Cuando vas buscando el placer no puedes amar, porque la persona que va buscando el placer utiliza al otro como medio.
La segunda palabra que hay que comprender es la felicidad. El placer es algo fisiológico; la felicidad es algo psicológico. La felicidad es un poco mejor, algo un poco más refinado, un poco más elevado... pero no muy distinto del placer. Podría decirse que el placer es una clase más baja de felicidad y que la felicidad es una clase más elevada de placer: las dos caras de la misma moneda.
La tercera es la alegría: la alegría es algo espiritual. Es algo distinto, completamente distinto del placer y de la felicidad. No tiene nada que ver con lo externo, con el otro; es un fenómeno interno. La alegría no depende de las circunstancias; es algo tuyo. No es una excitación producida por las cosas; se trata de un estado de paz, de silencio, un estado meditativo. Es espiritual.
Existe otra cosa que va más allá de la alegría. Él (Buda) lo llama dicha. La dicha es algo absoluto. No es algo fisiológico, ni psicológico ni espiritual. No sabe de divisiones; es indivisible.
La dicha significa alcanzar el núcleo más profundo de tu ser. Se encuentra en las profundidades últimas de tu ser, donde ni siquiera el ego existe, donde reina el silencio: tú has desaparecido.
Se ha disuelto el ego; es un estado de no-ser. Buda lo llama nirvana.
El placer hay que arrancárselo a otro: o eres mendigo o eres ladrón. La dicha te hace el amo.
NOTA
En psicología los términos felicidad y alegría están intercambiados frente a la definición de Osho. Alegría sería una emoción obtenida por algo externo y la felicidad un sentimiento interno.